Llegué de mano de su actual coordinador, Sebas Santiago, a media temporada, para hacerme cargo del alevín escolar. Desde entonces, hemos intentado hacer las cosas lo mejor posible, marcando pautas de trabajo, cambiando hábitos... pero sobretodo intentando que los niños, sin dejar de divertirse, comenzaran a aprender a jugar a fútbol sala.
Después de este tiempo, ya con dos equipos alevines "supervisados" por mi, puedo decir que todos han mejorado, y eso es una gran noticia. Aunque les queda muchísimo por aprender a todos los niveles, es gratificante ver que evolucionan.
Riera (en su sección de fútbol sala, ya que también cuenta con la de baloncesto), bajo mi punto de vista, es un club "familiar". La mayoría de niños que juegan en su base (actualmente: benjamín, alevin, cadete y juvenil), son del barrio, o como mucho, del mismo Cornellà. Eso es un hecho diferencial que hace que los jugadores que crecen allí, que van subiendo, se identifiquen mucho con ese club, su club, y con sus colores.
Siempre han tenido que compartir pabellón con el F.S.Cornellà, pero desde hace poco, los vecinos disfrutan de las nuevas instalaciones en el barrio de St.Ildefonso, y Riera gestiona su pabellón exclusivamente, haciendo que sólo los colores "verdinegros" pueblen la peculiar pista de la que disponen. ¿Por qué es peculiar? ¿Nunca habeis estado? pues os explico...
El Polideportivo de Riera, para empezar, es difícil de encontrar si no conoces dónde está, o si no aciertas a ver el cartel que cuelga de su fachada.
Como hemos comentado muchas veces con la misma gente del club, la que lleva años allí, parece hecho a mala leche! jejeje Tiene una sola grada, en altura, detrás de una de las porterías, justo en frente de la única puerta de entrada al pabellón que existe. Para llegar a ella, has de pasar por delante de los vestuarios, y atravesar los treinta y pico metros (porque no hace cuarenta de largo, eso seguro) de la pista de juego, por el lado contrario a los banquillos.
En federados, los árbitros impiden que haya gente en ese lado como público (demasiado cerca de pista). Pero en escolares, cualquier sitio es bueno!
La singular distribución del polideportivo, sumado a las dimensiones reducidas de la pista y al color oscuro del parket, hacen que Riera sea "diferente". Tiene su encanto, la verdad! Como local, está genial. Como visitante... pista difícil!
Desde que estoy allí, me siento en casa, me han acogido genial, tanto los niños, como el grupo de padres (aspecto en teoría secundario, pero que nunca está de más que sume en lugar de restar), como la gente del club con la que trato.
Esta claro que, como la gran mayoría de clubs, tiene margen de mejora, cosas que se pueden hacer mejor, pero llevan muchos años "en pie", y eso es algo siempre a valorar.
Mis alevines! |
Por ser un club que conozco desde mi edad juvenil, de los de toda la vida del Baix Llobregat, vecino de mi Esplugues natal, y ahora mi otra casa, le deseo la mejor de las suertes. Espero que siga creciendo, que lo haga fuerte, y mi consejo es que intente mantener por encima de todo esa identidad que se palpa en sus niños, esa que ha de ser su "factor diferencial". Nadie como la gente de casa puede defender los intereses de un club.
JACOB BUSTAMANTE
Jacob acabo de leer este post (un poco tarde) y además de estar completamente de acuerdo contigo, me alegra que tengas esta opinión del club y que te hayas sentido como en casa, espero que mantengas la opinión del Riera.
ResponderEliminarUn saludo. Aitor J